Qué es el Balletcore y cómo incorporarlo a tu armario

Como su propio nombre indica, la cosa trata de ballet. Si en anteriores temporadas nos hemos obsesionado con la estética del tenis (en concreto la estética de los clubs deportivos de la clase alta, claro) esta vez, las pasarelas, publicaciones, tendencias y demás agentes de la industria indican que es el turno del ballet.

Lo deportivo ya sabíamos que estaba de moda, el Athleisure lleva tanto tiempo entre nosotros que podríamos dejar de llamarlo “una moda” para, directamente, definirlo como la estética de una generación. A las generaciones más jóvenes les gusta la comodidad, las zapatillas y los chándales pero, a la más joven de las generaciones, en concreto a la Gen Z, se le ha unido en las últimas temporadas la obsesión por la estética Old Money o, dicho de otro modo, la estética de esas familias que, no solo son ricas, sino que descienden de largos linajes de ricos y que han vivido rodeados de dinero desde que el mundo es mundo, la cosa va de perlas, diademas y el jersey a los hombros.

No sabemos si la unión de ambos (Athleisure y Old Money) es lo que nos lleva al Balletcore del mismo modo que nos llevó antes al tenis de las familias adineradas con sus faldas de tablas y polos de marca. Seguramente, habrá muchísimos más factores, pero con estas cosas, como siempre, solo nos queda teorizar. Lo que está claro es que el Balletcore está de moda.

El Balletcore es deportivo y cómodo, sí, pero también romántico, dulce e inocente. Colores empolvados, prendas cómodas y ligeras y detalles femeninos componen el armario definitivo del Balletcore que resumimos hoy en 7 prendas (y dónde comprarlas a precios asequibles). Eso sí, como siempre, la tendencia no exige practicar el deporte en cuestión, esto es solo cosa de estética, faltaría más.