Qué es el Quiet Luxury y por qué se pone de moda ahora
El Quiet Luxury es una de las últimas grandes tendencias, y no nos referimos solo a cuestiones de moda, sino a cualquier industria con la mínima relación con el lujo, como la belleza o el automovilismo.
La idea es fácil de entender y tan vieja como el viento, se trata de lujo sin ostentación, de huir de logos, monograms y tendencias fugaces para abrazar lo discreto, la calidad y la atemporalidad pero, por supuesto, a altos precios. Es, en resumidas cuentas, lo que toda la vida hemos entendido por “elegancia”, es poder llevar un abrigo beis sencillo que vale miles de euros, un discreto bolso de cuero que no necesita logo para que quede claro lo caro que es y un jersey de cashmere de la más alta calidad; es Celine, Bottega Veneta o The Row, es no tener que gritar a los cuatro vientos lo rico que eres, porque está claro.
Llámalo Quiet Luxury o Stealth Wealth o, como se ha traducido al castellano, Lujo Silencioso o Discreto, pero la tendencia no es ni una novedad y ya la hemos visto antes. Es un hecho histórico y habitual que cuando las cosas le van bien a la gente (económicamente hablando), sobre todo a los ricos, les da por enseñar todo lo que tienen, grandes logos, joyas, deportivos y ostentación. Sin embargo, cuando las cosas se tuercen, el sistema se tambalea, y los miedos por el futuro afloran, mostrar todo tu potencial económico de una manera tan descarada no parece la mejor de la ideas. Es entonces cuando los ricos se autocontrolan y dejan de mostrar su riqueza a la masa, y decimos a “la masa” porque tampoco es que se esconda del todo, ya que el que sabe sabe, y sabe perfectamente que ese bolso discreto vale muchísimo más que cualquier bolso repleto de logos.
Después vienen los menos pudientes, que una vez más imitan a los de arriba y esto se vuelve tendencia. A veces hace falta un “evento cultural” que haga explotar definitivamente la tendencia, ya sea una serie de televisión, en look de alfombra roja o la estética de la celebrity del momento. En este caso, ha resultado ser el mediático juicio de Gwyneth Paltrow y los looks que esta nepo baby (otro gran concepto) ha llevado a la corte y se han viralizado día tras día. Un look de Prada de los pies a la cabeza y botas de Celine que podrían pasar por alto para la mayoría es uno de los ejemplos pero, una vez más, el que sabe sabe.
Y bien, ¿en qué se traduce esto para los mortales de a pie que, por supuesto, no vamos a vestir de Prada de los pies a la cabeza? Pues en una moda más clásica y neutra, pensada para durar y no descartar en pocos meses, algo que ya viene tiempo pegando fuerte en aras de lo eco, comprar menos pero mejor y, si no te puedes permitir Prada, quizá sea suficiente con cambiar esas decenas de camisetas básicas que tienes de fast fashion que se deshacen solo con mirarlas por un par de mejor calidad que aguanten un poquito más en el armario. Nada que no se haya dicho antes, ¿verdad?