¿Qué es el Demi Couture?

Si leíste nuestro post sobre los tipos de moda seguramente tengas clara la diferencia entre la Alta Costura y el Prêt-à-Porter, pero puede que todavía te suene raro el término Demi Couture, literalmente la costura “a medias”.

Si la Alta Costura es la artesanía, las incontables horas de trabajo manual dedicadas a cada prenda, la exclusividad, el hecho a medida y lo único; el Prêt-à-Porter es todo lo contrario: lo hecho en serie, comprado por tallas y vendido una y otra vez, hecho, como su propio nombre indica, listo para vestir. Pero entre estas dos “modalidades” hay un largo camino, y no podemos simplemente pretender que todo sea lo uno o lo otro, el todo o la nada, y de ello surge el Demi Couture, algo entre medias de los dos.

El Demi Couture generalmente se presenta dentro de las colecciones de Prêt-à-Porter, son prendas con mucho trabajo manual y de alta calidad pero que, sin embargo, están fuera de toda esa parafernalia que supone la Alta Costura. Las horas de trabajo dedicadas a cada una de las piezas es claro ejemplo de ello, si para una de Alta Costura pueden ser necesarias unas 2000 horas de trabajo manual, trabajo hecho siempre a medida, en una de Demi Couture puede ser suficiente con entre 150 y 200 horas de trabajo manual (en todo caso muchas más que las de las piezas simplemente Prêt-à-Porter) y, por supuesto, se venden por tallas. Estos vestidos se plantean como el hit de los desfiles, un vestido joya que puede cerrar el show o algún otro que será el que acapare las portadas y las publicaciones en redes sociales, dándole a la colección completa una primera imagen o “portada” inmejorable.

Muchas de las firmas más importantes llevan tiempo utilizando esta estrategia, firmas como Chanel, Valentino o MiuMiu incluyen en sus colecciones Prêt-à-Porter piezas de Demi Couture que la clientela más exclusiva puede adquirir con más facilidad que las de Alta Costura, pero con mucho más valor en todos los sentidos de la palabra) que las prendas más básicas del desfile. Otras como Balmain la están haciendo su carta de presentación, siendo los vestidos llenos de apliques, adornos y, por consiguiente, las horas de trabajo manual, la seña de la casa en la actualidad, mini-obras de arte que, sin embargo, vemos en cada uno de los closet tour de lujo y que no presenta, por lo tanto, la exclusividad de la Alta Costura tradicional.