Iris van Herpen, tecnología y artesanía unidas
Cada vez que Iris van Herpen presenta una nueva colección las imágenes de sus prendas vuelan por las redes, y es que cada pasarela es un soplo de aire fresco en el panorama actual de la moda, algo a lo que todavía no nos hemos acostumbrado y nos sigue alucinando cada temporada.
Creíamos que ya estaba todo inventado en la moda y que esta no hace más que dar vueltas y traernos una y otra vez las mismas tendencias y técnicas de siempre reinterpretadas de otro modo, pero Iris van Herpen ha sabido crear algo a lo que podríamos llamar “nuevo”.
Su manera de experimentar con nuevas técnicas y materiales hace que cada colección sea una sorpresa y de alguna manera consigue que los diseños sean, por un lado, naturales y orgánicos, adaptados al cuerpo humano perfectamente y, por el otro, totalmente futuristas y de ciencia ficción, por difícil que parezca esta unión. Según sus propias palabras, lo que más tiempo le lleva en la creación de una colección es la investigación, y es que los diseños son la suma de una gran investigación tecnológica y el trabajo artesanal, otra vez una unión inusual.
Van Herpen nació en Amsterdam en 1984 y se formó en el Institute of the Arts Arnhem, donde consiguió una beca para trabajar en los talleres de Alexander McQueen, algo que obviamente afectó a su gusto por la escenografía. En 2007 creó su propia firma y desde entonces no ha hecho más que dejarnos con la boca abierta cada temporada y vestir a las celebrities más importantes.
Solo 4 años más tarde de fundar su firma ya empezó a hacer Alta Costura y desfilar oficialmente para la Fédération de la Haute Couture et de la Mode como invitada, hasta que en 2020 se convirtió en miembro oficial, y es que solo hace falta ver un diseño suyo para entender que lo suyo es, sin lugar a dudas, Alta Costura.